5 razones para pasarte a una comercializadora de energía 100% renovable

5 razones para pasarte a una comercializadora de energía 100% renovable

Si eres lo bastante mayor para haber hecho la EGB, recordarás la época en que el sistema energético en nuestro país estaba totalmente regulado por el gobierno. Eso fue antes de 1997, cuando la Ley del Sector Eléctrico 54/1997 abrió un proceso que liberalizó el sector. En la actualidad, es la Ley 24/2013 la que está en vigor y sustituye a la anterior.

En este nuevo panorama aparecieron dos tipos de empresas:

– Las distribuidoras, que hacen llegar la energía a los puntos de suministro.

– Las comercializadoras, que son las que facturan por la energía consumida.

Parece obvio decirlo: la electricidad que llega a tu hogar es la misma sea cual sea el método en que ha sido creada. Así que, si una empresa comercializadora te oferta energía que ha sido creada totalmente a partir de fuentes renovables, ¿por qué deberías escogerla?

Pues deberías. Y te vamos a explicar por qué.

 

ahorra-en-tu-factura-de-la-luz

 

1. Porque es verde

Es tan evidente que hasta los niños lo saben y se encargan de recordárnoslo cuando se nos olvida: nuestra forma de vivir, de movernos, de explotar recursos, de divertirnos, de construir, y, por supuesto, de obtener energía, tiene un coste muy alto para el ecosistema de nuestro planeta. Ya no es solo un buen tema para película de catástrofes: es una realidad y solo tienes que poner las noticias si necesitas pruebas.

Las fuentes de energía fósiles y no renovables dejan una enorme huella en su creación, transporte, almacenamiento y en la gestión de los residuos generados. Sin embargo, el aspecto más comentado siempre es el de la emisión de dióxido de carbono, conocido como CO2.

Aunque algún titular te haya llevado a confusión, el CO2 no es un gas contaminante y los seres vivos lo expulsamos de forma regular a la atmósfera, desde donde es reciclado por las plantas y bacterias marinas. Pero igualmente debería preocuparte. Y la razón es que el ser humano crea una cantidad tan enorme de ese gas y a un ritmo tan rápido que el ciclo natural no es lo bastante rápido para asimilarlo y se acumula en la atmósfera.

El CO2 tiene una propiedad conocida como efecto invernadero, que has escuchado muchas veces pero que quizá pocas te habrán explicado. Es muy sencillo: los gases invernadero como el CO2 retienen el calor en las capas bajas de la atmósfera y la calientan. Es así de sencillo. No parece algo muy espectacular ni preocupante, pero ha contribuido a subir la temperatura global en la Tierra desde el inicio de la Revolución Industrial y, por lo tanto, a que se generen diversos fenómenos climáticos extremos de drásticas consecuencias.

Por eso es tan importante que demos cada vez mayor protagonismo a las fuentes de energía renovables en detrimento de las de origen fósil. Porque emiten poco o ningún CO2.

2. Porque estás exigiendo

Y aunque seas lo bastante joven como para no saber qué era la EGB, seguro que ya sabes esto: cuando algo es rentable, las administraciones públicas y los gobiernos prestan más atención.

Contratando y consumiendo energía 100% renovable estás ayudando a hacer sostenible la industria de producción de energía solar, eólica e hidráulica. Por lo tanto, estás propiciando el aumento de la inversión e investigación en las tecnologías que hacen posible que la energía que hace funcionar tu calefacción, tu coche y tu ordenador no tenga un coste inaceptable para el mundo en el que va a vivir tus hijos.

Además, dejarás claro un mensaje a las administraciones presentes y futuras, que llegará más lejos y calará más profundo que los likes en las redes sociales. Y esta vez ya verás como te hacen caso. Porque no creas que se trata de una industria residual, sino de un mercado al alza desde que ley permitió la entrada de las comercializadoras de energía renovable. Año tras año, son cada vez más los consumidores que se suman a esta opción.

3. Porque no es más cara

Te han dicho muchas veces que debemos consumir productos respetuosos con el medioambiente. Y seguro que estás convencido desde hace tiempo, pero tu sueldo es el que es y a veces “lo verde me sale caro”. Así que estarás pensando que todo esto que te estamos contando está muy bien, pero que no puedes permitírtelo.

Sin embargo, la realidad es que es más barato producir la electricidad a partir de fuentes que son virtualmente inagotables, como luz y el viento y que además no deben pagar derechos de emisión de C02. Es decir, tu compromiso y tu apuesta por lo sostenible no te van a costar un euro de más. Por cero coste para ti, el planeta y las generaciones que vengan después a habitarlo saldrán beneficiados.

4. Porque no depende de la política internacional

No es necesario que sepas mucho de historia ni que veas a menudo las noticias: los acontecimientos internacionales influyen de forma muy notoria en los precios del mercado de las no renovables. Un ejemplo clásico serían las crisis del petróleo de 1973 y 1979, motivadas por los acontecimientos políticos en Oriente Próximo, que propiciaron una honda crisis económica.

Esto es así porque recursos naturales como el petróleo, el carbón o el uranio están distribuidos de forma desigual. Sin embargo, las fuentes naturales, como el sol y el viento, se encuentran en todo el planeta y por lo tanto, su producción y distribución no se ven afectadas por los diversos y continuos conflictos de la política internacional. Así pues, es un mercado estable, lo que, desde luego, conviene mucho a tu bolsillo.

5. Porque es nuestra

Es muy posible que hayas llegado hasta aquí pensando: “muy bien, pero a mí todo eso del cambio climático me viene muy grande, aún no me habéis convencido”.

Pues te vamos a convencer. Como sabrás, España no es un país productor de petróleo. Toda la gasolina, el gas y otros derivados del crudo que consumimos tenemos que comprarlos fuera, a precios (como te habrás dado cuenta) cada vez más altos. Incluso compramos energía eléctrica a Francia, donde más del 70% es producida en centrales nucleares.

Pero en las energías renovables, quizá no lo sepas, no somos ningunos aprendices. España es el 9º país del mundo en la implantación de las energías verdes. Estamos en el Top Ten. En Europa formamos parte de los tres países del equipo de cabeza en este sector, junto con Alemania e Italia, especialmente en eólica y solar. En los últimos años, de hecho, nuestro país ha comenzado a exportar a otros países europeos (especialmente los nórdicos), electricidad generada a partir de fuentes renovables. Somos buenos en esto y cada día lo somos más.

Así que, contratando una comercializadora de energía 100% renovable también estás invirtiendo en una industria española de futuro y también contribuyes a la independencia energética de España.

Piénsalo.